Woman lying in hospital bed holding her newborn baby in her arms

Scientific Article

COVID-19: Recomendaciones piel con piel

Zoe Watson


En los primeros momentos de vida, se ha probado que el contacto piel con piel entre la madre y el/la bebé tiene muchos e importantes beneficios y un efecto positivo, a nivel físico y emocional, para ambos.1
Por lo tanto, no nos sorprende que además de ser beneficioso durante la transición de feto a recién nacido, las primeras horas de vida de un bebé tengan un impacto duradero y a largo plazo en su continuo desarrollo.

¿Cuáles son los beneficios que proporciona el contacto piel con piel?

  • Calma y relaja a ambos, tanto a la madre como al bebé.
  • Ayuda al bebé a regular la frecuencia cardíaca y a respirar.
  • Facilita la transición del estado fetal al nuevo estado de recién nacido.
  • Aumenta el interés por la alimentación.
  • Regula la temperatura del bebé.
  • Permite la colonización de la piel del bebé por parte de las bacterias beneficiosas de la madre, proporcionándole protección contra posibles infecciones
  • Estimula la liberación de las hormonas que favorecen el establecimiento de la lactancia materna y el desarrollo del vínculo entre ambos.2

Beneficios adicionales para aquellos bebés que están en la unidad neonatal

En el caso en el que un bebé haya sido derivado a la unidad de cuidados intensivos neonatales, hay estudios recientes que demuestran que el contacto piel con piel es una intervención sin coste alguno y de alto impacto que reduce la mortalidad y la morbilidad en los infantes pretérmino.3 El establecimiento temprano e ininterrumpido del contacto piel con piel y los cuidados de mamá mejoran significativamente los niveles de supervivencia neonatal y reducen los niveles de morbilidad.4

Los beneficios adicionales que recibe el/la bebé en la unidad neonatal incluyen:

  • La mejora en los niveles de saturación de oxígeno
  • La mejora en el comportamiento para establecer la alimentación
  • La reducción en los niveles de cortisol, en concreto, en los casos en los que hubiera habido sufrimiento
  • Ayuda al crecimiento
  • Posible reducción en los tiempos de hospitalización

Además, se ha evidenciado que en los casos en los que la madre ha practicado el contacto piel con piel, su volumen de leche mejora y la leche contiene anticuerpos y otros beneficios adicionales conocidos.2

El efecto COVID-19

El primer caso de COVID-19 fue identificado en diciembre de 2019 y siguiendo su propagación exponencial, la Organización Mundial de la Salud declaró el estado de pandemia global en marzo de 2020.5

Durante el aumento de casos de COVID-19, el conocimiento respecto al virus era limitado y también se desconocían los efectos que podría tenía sobre la población en general y, más aún sobre grupos específicos como el de las mujeres embarazadas y los bebés.6 Debido a la falta de evidencia científica entre los profesionales de la salud, surgió un dilema de lo más retador respecto al nacimiento de los bebés cuyas madres habían dado positivo en COVID-19. ¿Se debía seguir con el establecimiento del contacto piel con piel en base a los beneficios que se conocían hasta el momento? O, por el contrario, ¿La práctica debía detenerse en base a los efectos que aún se desconocían por la posible transmisión neonatal? Un informe realizado en base a las prácticas llevadas a cabo en 33 hospitales, mostró que, en la mayor parte de los casos, no se recomendó que las madres que hubieran dado positivo en COVID-19 se mantuvieran al lado de sus bebés.

Sin embargo, estas directrices estuvieron basadas en el miedo por los posibles efectos adversos y prácticas llevadas a cabo en otros hospitales, más que en la evidencia obtenida de anteriores situaciones pandémicas virales.7 La investigación muestra ahora que cuando una madre es sospechosa de tener el virus o es un caso de COVID-19 confirmado, y es separada de su bebé, esta separación, que implica la falta de contacto piel con piel, pone a los bebés en mayor riesgo de complicaciones de salud a lo largo de su vida o incluso de muerte.8

Sin embargo, es preocupante que estas interrupciones en la práctica de mantener a las madres cerca de sus bebés para facilitar el contacto piel con piel y el inicio temprano de la lactancia materna estén tan generalizadas. El análisis sistemático de 20 directrices clínicas provenientes de 17 países demostró que una tercera parte de las recomendaciones de separación madre/bebé se produjo debido a que la madre era sospechosa de tener el virus o en casos confirmados de COVID-19. Este informe indica que se trata de un "procedimiento que afecta de manera grave a la calidad de los cuidados proporcionados a los bebés prematuros y enfermos, provocando sufrimiento innecesario e incluso la muerte."9

Se estima que manteniendo juntos a las madres y a los bebés, incluso durante la pandemia, se podrían haber salvado más de 125. 000 vidas infantiles.8

La recomendación de la Organización Mundial de la Salud

Teniendo en cuenta los desarrollos más recientes de la evidencia científica que rodea los escenarios que incluyen a las madres, los bebés y el contacto piel con piel, las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud no podrían ser más claras en este sentido y el contacto piel con piel es la mejor práctica.10 En un estudio reciente, de 80,000 pacientes chinos sintomáticos de COVID-19, solo se informaron 6 casos de recién nacidos de madres infectadas con COVID. Esto significa una baja tasa de transmisión entre la madre y el recién nacido. En los casos en que los recién nacidos dieron positivo por COVID-19, todos los bebés infectados se recuperaron por completo sin necesidad de intubación.11 Por lo tanto, con el lanzamiento de investigaciones cada vez más emergentes que apoyan el contacto piel con piel entre la madre y el bebé en los primeros momentos de vida, la guía de la Organización Mundial de la Salud la ha afirmado como la práctica estándar de oro: "Las madres y los/las bebés deberían poder estar juntos y establecer el contacto piel con piel, practicar el cuidado de mamá canguro, mantenerse en la misma habitación tanto de día como de noche, en especial en la etapa inmediatamente posterior al nacimiento y hasta que se establezca la lactancia materna, independientemente de si la madre o el bebé es un caso sospechoso, probable o confirmado de COVID-19."10

Zoe Watson

Matrona y enfermera de adultos

Zoe es enfermera titulada y matrona, y posee más de 10 años de experiencia. Ha trabajado en puestos muy diferentes que abarcan cargos tan diferentes como el de especialista en un grupo de partos domiciliarios, como enfermera de partos de riesgo y, más recientemente, en una maternidad. Zoe es una profesional muy apasionada que ofrece todo su apoyo a las familias cuya salud está en sus manos. Es una persona que posee formación en soporte vital a neonatos, cirugía perineal, cuidado de adultos y, recientemente se ha formado como profesora de hipnopartos.

1Phillips, R. (2013). Uninterrupted Skin-to-Skin Contact Immediately After Birth. Newborn and Infant Nursing Reviews. 13 (2), 67 - 72.
2Unicef. (2020). Skin-to-skin contact. Available: https://www.unicef.org.uk/babyfriendly/baby-friendly-resources/implementing-standards-resources/skin-to-skin-contact/. Last accessed 15th April 2021.
3World Health Organization, UNICEF. 2014. Every Newborn: an action plan to end preventable deaths. Geneva: World Health Organization.
4World Health Organization. 2015. WHO recommendations on interventions to improve preterm birth outcomes. Geneva: World Health Organization.
5World Health Organization. (2020). Listings of WHO’s response to COVID-19. Available: https://www.who.int/news/item/29-06-2020-covidtimeline. Last accessed 12th April 2021.
6Williams J, Namazova-Baranova L, Weber M, Vural M, Mestrovic J, Carrasco-Sanz A, Breda J, Berdzulli N and Pettoelle-Mantovani M. (2020). The Importance of Continuing Breastfeeding during Coronavirus Disease-2019: In Support of the World Health Organization Statement on Breastfeeding during the Pandemic. European Paediatric Association. 223 (1), 234 - 236.
7Vu Hoang D, Cashin J, Gribble K, Marinelli K & Mathisen R. (2020). Misalignment of global COVID-19 breastfeeding and newborn care guidelines with World Health 8Organization recommendations. BMJ Nutrition, Prevention & Health. 3 (1), 339 - 350.
World Health Organization. (2021). New research highlights risks of separating newborns from mothers during COVID-19 pandemic. Available: https://www.who.int/news/item/16-03-2021-new-research-highlights-risks-of-separating-newborns-from-mothers-during-covid-19-pandemic. Last accessed 29th April 2021.
9Minckas N, Medvedev M, Adejuyigbe E, Brotherton H, Chellani H, Estifanos A et al. (2021). Preterm care during the COVID-19 pandemic: A comparative risk analysis of neonatal deaths averted by kangaroo mother care versus mortality due to SARS-CoV-2 infection. The Lancet. 33 (1), 1-8.
10World Health Organization (2020a). Clinical management of severe acute respiratory infections (SARI) when COVID-19 disease is suspected. Available at: https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/331446/WHO-2019-nCoV-clinical-2020.4-eng.pdf . Last accessed 28th April 2020.
11Ma X, Zhu J and Du L. (2020). Neonatal Management During the Coronavirus Disease (COVID-19) Outbreak: The Chinese Experience. Neoreviews. 21 (5), 293 - 297.