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Cuidado bucodental de bebés y niños pequeños

Dr. Jeremy Dixon


La atención odontológica profesional precoz y las prácticas de higiene bucodental infantil son esenciales para aumentar las posibilidades de que un niño no padezca enfermedades bucodentales prevenibles. En todo el mundo, el 43% de los niños tiene caries sin tratar.1 La prevención de la caries infantil debe comenzar en la infancia. El establecimiento de un hogar dental (es decir, la primera visita al dentista) debe realizarse a más tardar a los 12 meses de edad. De este modo, el dentista puede evaluar los riesgos específicos de enfermedad bucodental del niño y, al mismo tiempo, educar a los nuevos padres sobre las mejores prácticas de higiene bucodental.

El hogar dental (Dental Home)

En la primera visita al dentista, el profesional evaluará el crecimiento y el desarrollo del niño y podrá orientar a los padres sobre los factores de riesgo individuales del niño. Esto permite al equipo odontológico ofrecer recomendaciones preventivas personalizadas a las necesidades individuales del niño. Además, el establecimiento del hogar dental facilita la coordinación de la atención especializada para el niño, incluida la atención de urgencia. Los estudios sugieren que los niños que tienen un hogar dental establecido a una edad temprana tienen menos probabilidades de requerir un tratamiento dental costoso y más probabilidades de recibir atención dental en un centro de salud dental adecuado en lugar de en un servicio de urgencias hospitalario.2,3 Por último, las investigaciones demuestran que los niveles de ansiedad de los niños ante las visitas al dentista disminuyen a medida que aumenta su familiaridad con el entorno de la consulta.4
La exposición temprana al entorno dental puede conducir a un cuidado dental más feliz, más productivo y menos costoso a lo largo de la vida del niño.

Rutinas de higiene bucal

Los cuidados bucales rutinarios en casa deben empezar incluso antes de que a los niños les salga el primer diente. Los cuidadores deben limpiar las encías de los bebés con un paño suave y limpio por la mañana después de la primera toma y justo antes de acostarse para eliminar las bacterias y los azúcares que pueden provocar caries (en caso el bebé tome formula). Estimular el tejido de las encías también puede aliviar la dentición del bebé y facilitar la salida de los dientes.5 Cuando salgan los dientes, los padres debe comenzar a cepillar dos veces al día con un cepillo pequeño de cerdas suaves y una cantidad de pasta dentífrica con flúor del tamaño de un grano de arroz. A los 3 años se recomienda aumentar a una cantidad de pasta dentífrica con flúor del tamaño de un guisante.6
Cepillar los dientes a un niño pequeño puede suponer un reto para los padres. Muchos niños se resisten activamente al proceso. Por eso, hasta que se acostumbren al cepillado, es aconsejable empezar con el cuidador y el niño sentados en una superficie plana y blanda, como un sofá o una cama. Los adultos están condicionados a cepillarse los dientes en el lavabo, pero cuando se cepilla a un niño que se resiste hay más control y mejor visibilidad si el niño está sentado mirando al cuidador o tumbado con la cabeza en el regazo del cuidador.
Para los niños pequeños, una forma fácil y eficaz de cepillarse los dientes es utilizar el método circular. Con una mano, coloca el cepillo contra el diente perpendicularmente mientras realizas 4-5 pequeños movimientos circulares en cada zona. Se presta especial atención al margen entre los dientes y el tejido de las encías, ya que es donde tiende a acumularse la placa. Una ventaja de este método es que las superficies externas de los dientes superiores e inferiores pueden cepillarse simultáneamente incluso cuando el niño muerde. Para cepillar las superficies internas de los dientes es necesario que el niño abra ligeramente la boca. El cepillado de las superficies internas, especialmente en el arco inferior junto a la lengua, resulta desagradable para algunos niños, por lo que puede ser útil cepillar esas zonas en último lugar. La mano libre del cuidador puede utilizarse para estabilizar la cabeza, retraer suavemente los labios o como barrera para que las manos del niño no interfieran.
Naturalmente, al cepillarse fuera del lavabo surgen dudas sobre el aclarado de la pasta de dientes. Si se utiliza la cantidad adecuada de pasta de dientes, no es necesario aclararlo. De hecho, los estudios sugieren que al no aclarar el enjuague maximiza la eficacia del flúor, lo que reduce el riesgo de caries.7

Conclusión

Una evaluación dental acompañada de una higiene dental temprana constituyen la piedra angular de la salud bucodental del niño. Dado el asombroso número de niños que padecen caries dental en todo el mundo, es imperativo iniciar la prevención desde la infancia. Establecer un hogar dental a la edad de 12 meses no solo permite una evaluación exhaustiva de los riesgos específicos de enfermedad bucodental del niño, sino que también sirve de plataforma inestimable para educar a los padres en prácticas óptimas de higiene bucodental.

Dr. Jeremy Dixon

Dentista pediátrico

El Doctor Jeremy Dixon es un distinguido dentista pediátrico con amplia experiencia. Licenciado con honores por la Facultad de Odontología de la Universidad de Buffalo, es Doctor en Cirugía Dental y posee un Certificado en Odontología Pediátrica del Centro Médico Infantil Cohen. 

Como director general de Odontopediatría Gramercy en Nueva York, garantiza una atención de máxima calidad en un entorno acogedor. El Doctor Dixon fue Director de Odontología en el Hospital Infantil St. Mary, donde promovió la atención odontológica a niños con necesidades especiales. También es educador, contribuye al equipo craneofacial de Weill Cornell e instruye a residentes en el Hospital Weill Cornell. 

Con licencias en soporte vital avanzado pediátrico y técnicas de sedación, el Doctor Dixon es miembro activo de varias sociedades dentales de prestigio. Su compromiso con la odontopediatría abarca más de dos décadas

Informe sobre la situación mundial de la salud bucodental: hacia una cobertura sanitaria universal de la salud bucodental para 2030. Ginebra: Organización Mundial de la Salud; 2022. Licencia: CC BY-NC-SA 3.0 IGO.

 2. Nowak AJ, Casamassimo PS, Scott J, Moulton R. ¿Las visitas tempranas al dentista reducen el tratamiento y su coste en los niños? Pediatr Dent. 2014 Nov-Dic;36(7):489-93. PMID: 25514078.

 3. Allareddy V, Nalliah RP, Haque M, Johnson H, Rampa SB, Lee MK. Visitas a urgencias hospitalarias con afecciones dentales entre los niños de Estados Unidos: datos epidemiológicos a escala nacional. Pediatr Dent. 2014 Sep-Oct;36(5):393-9. PMID: 25303506.

 4. Greenbaum PE, Melamed BG. Modelado previo al tratamiento: una técnica para reducir el miedo de los niños en el quirófano dental. Dent Clin North Am 1988;32(4):693-704.

 5. Memarpour M, Soltanimehr E, Eskandarian T. Signos y síntomas asociados a la erupción dental primaria: ensayo clínico de remedios no farmacológicos. BMC Oral Health. 2015 Jul 28;15:88.

 6. Academia Americana de Odontopediatría. Directrices sobre fluorterapia. Manual de referencia de odontopediatría. Chicago, Ill.: Academia Americana de Odontopediatría; 2017:181-4.

 7. Sjögren K, Birkhed D. Factores relacionados con la retención de flúor tras el cepillado dental y posible relación con la actividad de la caries. Caries Res 1993;27(6):474-7.